Aprovechando estas fechas en las
que la gente está dispersa en muchos sentidos, se han anunciado dos noticias medioambientales muy negativas. La primera viene de Castilla-La Mancha donde el
Gobierno de Cospedal ha decidido que ya no es necesario tener especialistas
para la recuperación de animales protegidos, como el lince ibérico. Ha
despedido de forma fulminante a todos los veterinarios y biólogos de los
centros de recuperación. Catorce personas, en total. Hasta ahora, se han
tratado a 2.500 animales silvestres en peligro de extinción por año. La
situación ahora es desconcertante. No se sabe qué va a pasar en enero con esos
centros sin especialistas ni con los animales que actualmente están siendo
tratados. WWF, SEO/BirdLife y Ecologistas En Acción alertan de las consecuencias.
La segunda viene de Navarra donde
el
hayedo protegido de Zilbeti está siendo destrozado en busca de minerales.
El hayedo está protegido por la Red Natura 2000 (áreas de conservación
de la biodiversidad de la UE). Sin embargo, esto no ha impedido la apertura hoy mismo de un claro en mitad del bosque. A parte de la importancia en sí del
hayedo, en él habitan algunos de los últimos ejemplares de pico dorsiblanco, que es el
pájaro carpintero más amenazado de la Península. Perdemos así un bosque de
belleza sin igual para ganar una mina a cielo abierto y unos cuantos millones en
el bolsillo de dos o tres listos. Lo denuncia SEO/BirdLife.
A ver cuánto tarda la UE en volver a castigar a España por estos hechos y que, una vez más, se nos vuelva a caer la cara de vergüenza. Al menos a mi, que cada día se me hace más difícil apreciar el país en el que vivo y nací.